Yo no miento, Juana me echó a las FARC.
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Pueden revisar todo el blog a ver si me salí de la ley colombiana.
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Entonces fuí hasta donde Maduro que era Ministro de Relaciones Exteriores de Venezuela y Juan Manuel Santos como Ministro de Defensa de Colombia me puso un brazalete de seguridad. Terminé con Plazas Vega que era lo menos peor en la cárcel.
Luego me desmovilicé como si fuera de las FARC y disminuyó el dolor corporal, me quitaron un poco de equipos de encima. Fuí a parar a donde José Eladio Pérez, ex-secuestrado, y nos siguieron atacando con unas máquinas de construcción marca Gato. De allí nos sacó el M-19.
Me desmovilicé por segunda vez como si fuera del M-19, me quitaron más aparatajes. Me comenzaron a dar cólicos muy fuertes. Pedí ayuda de la Cruz Roja y fuí consciente que el ejército no se desmoviliza. Una vez hacen los operativos con toda la familia, los desmovilizados se vuelven intocables mientras que la fuerza pública va a la A quedando a merced de todos los delincuentes. Nos fuimos para Medellín.
Esta vez llegó el ELN y nos pusimos a charlar, todo está escrito en Margarita, mientras que recibíamos señales que nos contaban la historia que ya relaté.
Una noche, mientras estaban las FARC aquí, trajeron al mismísimo Rodríguez Orejuela, empecé a tener pesadillas con escorpiones, e intentando comprobar que solo era transmisión de señales en video le metí un susto al actor Endry Cerdeño. Se me ocurre que Medellín ya estaba conmigo porque me señalaban en el computador canciones que contaban una historia, la historia de la muerte de mi mamá. No hay reparación posible. Y me pegaron algo en la lengua, recibían señales, por eso yo no confío en los buenos gustos, aquí al menos está por escrito, lo puedo palpar, verificar. Lo demás es tortura.
Ya en Medellín tuve que apelar a Mancuso, lo admito, y descubrí que todos los grupos armados tienen prácticas sexuales similares, pero un solo lápiz! Fué cuando Juana comenzó a gritar que En can to en pantalla, y se me ocurrió creerle, un choque entre dos fuerzas del estado, eso unido a que su potente máquina me sacaba del país me llevó a concluir de que se trataba de Plan Colombia. Supongo que las mafias tienen equipos similares.
Luego me le pegué a Palomino. Yo no entendía muy bien eso de tomar los nombres de los muchachos de las bandas de rock y presentarlos como delincuentes en los programas de City tv pero de todos modos confié en que tenía experiencia y me animé a escribirle solicitando una caución para Juana. La señora sigue aquí!
Pero lo que menos me gustó después de Daniel Rendón Herrera, alias Don Mario, haciendo alusión a mi hijo Daniel, fué el de Marquitos Figueroa, el traficante de la costa, me parece horrible relacionar a mi hijo Marco Andrés con tal individuo. Quién fué el imbécil que dijo que iba con Marquitos? Para mandarlo a comer espárragos!
Mi demanda al estado consiste en que nada de ésto hubiese sucedido si en principio la señora Juana Uribe Pachón no viene a importunarnos con sus equipos a nuestro hogar. Se le fué la mano en colaterales. Igual, solicito una sanción acorde para la funcionaria y ojalá una indemnización por los daños y perjuicios ocasionados.
Que desde cuándo comenzamos a tener problemas con la señora Juana Uribe? Practicamente desde De pies a cabeza, había un actor negrito. Pero para éste caso, desde Las muñecas de la mafia, ahí ya se escuchaba el eco. Y el ventilador. En adelante, todas las novelas producidas por Teleset tienen continuidad hasta Escobar, el patrón del mal.
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