Documento propuesto por:
Lucy Tatiana Galvis Peñuela
Siempre me ha interesado el
tema de la comunicación relacionada con las mesas de conversación, con el
diálogo entre combatientes. Por estos días viví una experiencia extrema, a raíz
de las pinchadas de Uribe, salimos favorecidos en la balotera y nos han caído
unos “guachimanes” de lo más horroroso a montar equipos de radiofrecuencias
sobre mi habitación, allí se encontraron Fernando Henao (QEPD), cuñado de Pablo
Escobar con Juana Uribe de Pachón, la libretista, cuya mamá fue secuestrada por
las FARC; hablaban sobre la posibilidad de producir una nueva novela: “Escobar,
el patrón del mal”. Cuando ella no estaba, Henao esperaba pacientemente y se
ponía a dialogar conmigo, me contaba historias sobre el estilo de vida que
había querido construir basado en las películas que él había visto sobre “El
Padrino” y estaba muy preocupado por su familia, pero no era cualquier familia,
él hablaba de su familia extendida como yo hablaba de la mía. En un punto
coincidimos, en que según él yo era hija de un gitano traficante de LSD de los
años 70’s y que había sido dado de baja en 1974 en el Valle, y de una cantante
española muy popular, integrante fundadora del ELN, mientras que su padre era
traficante de armas para las guerrillas. Y yo le decía, no señor, no se
equivoque, yo vengo de una familia en donde mi abuela era borbona, del apellido
Góngora y Góngora y él se reía, “Y el virrey Sol is”, haciendo referencia a que
los grupos ilegales trastocan el idioma para darle un sentido diferente, un sol
es un traficante grande, y como ellos no siguen estratos ni líneas de mando, ni
escalas de valores … él bien podía ser el Papa del narcotráfico. Y tenía un
humor más negro que la negrura, con la misma ternura con la que me hablaba
contaba sin tapujo como se había apoderado de las armas del ejército y hacía
inteligencia a partir de un contrato que tenía para hacer borlas de los gorros
de los clérigos, el más sensible, el de “Don Camilo”, una serie televisiva de
donde nació la idea. Y claro, como los militares están llenos de borlas y estandartes…
con el mismo material de los adornos de los hombros de los uniformes fabricaba
cortinas.
Y charlábamos delicioso, yo
al no poder comunicarme con el ejército y la policía, tenía intervenidas las
telecomunicaciones, hacía tiempo de manera imprudente hablándole sobre el
renacimiento italiano, yo sabía que era de su interés todo lo que tuviera que
ver con la cultura siciliana, pero también veneciana y romana. Algo ya le había
escuchado a Santofimio, y contaba, en los años 50’s la tarea de las potencias
era dar de baja nazis y en eso estaban, Santofimio hizo un acuerdo con Misael Pastrana
Borrero y le han puesto cámaras en los ojos a una mula, Henao era un joven que
cuidaba la mula, y he ahí que le ha dado por consentirla y quedó grabada su
imagen en las cámaras, como sería su susto cuando se vio retratado en el
popular “Cantinflas”. Henao hablaba sin tapujos, Santofimio lo veía muy bruto,
y le preguntaba si con esa brutalidad iba a hacer la revolución. Henao ya era
liberal y ya venía con Tirofijo. A cambio de sus buenos oficios, Pastrana
Borrero le permitió a Santofimio estudiar derecho en El Rosario y no era un
liberal cualquiera, era un liberal que jugaba ajedrez, últimamente jugaba
ajedrez con Henao mientras que conversaban con Alfonso López antes de morir.
Henao inevitablemente, yo
pienso, se enamoró de mí, no lo trataba mal y le ponía cada decisión suya con
respecto a su familia en contexto. Todo el tiempo trataba de impresionarme,
primero me traía grupos de vehículos del mismo color, unas veces blancos, otras
veces rojos, que estacionaba en fila al frente de mi casa como si enviara un
ramo de flores. Luego comenzó a exponer a diferentes personajes que hacían todo
lo que él pidiera, pasaron Mancuso, Vera, y hasta Cano y Jojoy, antes de morir.
Yo intenté escapar comunicándome con Plazas Vega y hasta estuve en el patio de
presos políticos que ya había conocido una vez que fuimos con una banda de
rock. Estábamos en esas cuando a Juana le dio por probar las torres gemelas, y
se nos han caído encima los cables de energía y las redes de telecomunicaciones
como si la situación fuera en vivo y en directo, el susto fue tan grande que yo
que había tomado un curso de primeros auxilios en la Cruz Roja salvé al viejito.
Él murió insistiendo en que él no había tenido nada que ver y hacía constantes
referencias a canciones que él mismo había financiado o a artistas que
aparentemente lo reportaban como Billy Joel y su “We didn´t start the fire”. Lo
mataron 4 veces, tenían que asegurarse, y yo lo lloré 4 veces, cómo no iba a
sufrir de Síndrome de Estocolmo.
Y entonces seguí hablando
con los demás convidados, hablamos de salud, de cómo esto de las
radiofrecuencias, como en “Los Tiempos del Ruido” era peligrosísimo, que la voz
de una soprano podría quebrar una copa de cristal. Los marines norteamericanos
que yo llamé, tenía un amigo de la marina porque había sido estudiante de
intercambio, recogieron sus equipos y la situación crítica se subsanó. Yo iba
escribiendo cada aparte de la investigación con los desmovilizados de los
diferentes grupos, me sentía una mezcla de “Barnabe Jones” y “Quincy”, y
entonces comenzaron a hablar del estatuto de seguridad, todavía proyectaban
imágenes, de una mente a otra, de secuencias con el “Muerte a Secuestradores”,
pero ya no con miedo sino como manera de asustar a la contraparte. Muchos
construyeron familias entre desmovilizados y con niños que no son los suyos,
todos le pusieron el nombre perfecto a los niños por si hay que decir algo importante
a través de los medios.
Lo de la proyección en la
mente, como sueños, yo los expliqué a partir de mi anosmia, falta de olfato,
así como otros sufren de ceguera o de sordera, yo no percibo olores y de
repente comencé a percibir aromas con sabores. Me comuniqué con el doctor
Llinás y él nos explicó que el cerebro tiene neuronas interconectadas por ondas
eléctricas y que proyectar electricidad en las diversas partes del cerebro
tiene diferentes consecuencias. Terminé haciendo una investigación práctica
sobre biónica. Pero los desmovilizados también tenían diferentes preguntas,
hubo algunas que no se las alcanzamos a explicar en vida a Henao como el hecho
de que cuando las mujeres en los cultivos ilícitos quedan embarazadas tienden a
tener niños deformes tras las fumigaciones. Él estaba muy interesado en la
genética y en el por qué la gente se parecía entre sí. Henao era genial, se
necesita ser un genio para ser un criminal.
Y también observábamos cómo
cada situación y palabra que íbamos pronunciando en la habitación se iba
replicando en la televisión, para ninguno de nosotros era sorpresa sólo que de
mí nunca habían hecho un retrato hablado. Finalmente lo obtuve con lo de las
chuzadas y lo publiqué en mi blog. Descubrimos que detrás de cada comunicación
había un mensaje proveniente de distintos grupos armados ilegales y que era muy
propio de los paramilitares utilizar estos códigos. Pero lo más grave es que
los medios se defendían enviando subliminales, entre otros hacían un Pavlov que
habían aprendido con las mafias, como siempre les ponían prostitutas de
interlocutoras, los subliminales estimulaban la acción sexual. Muy pronto se
dieron cuenta de que era una manera de incapacitar al combatiente y hasta se
atrevieron a decir que en el Palacio de Justicia lo que había ocurrido era una
orgía. Me llamó mucho la atención, años después, que han delegado en Otty
Patiño la proeza de avanzar sobre el proceso de Verdad, Justicia y Reparación y
él que venía desde Pasto hasta el Magdalena Medio jura que en todo su proceso
como combatiente jamás vio televisión.
Hay dos aspectos con
respecto a las imágenes, dicen que Tirofijo hacía todo lo posible por
comunicarse con China, estos son aparatos que integran medios con telefonía y
él sí se relacionaba con “Mario Baracus”, de hecho, los primeros
expedicionarios de las FARC en el contexto de La Guerra Fría, que fue
fundamentalmente una guerra mediática, fueron “Los supercampeones”. Y hay otra
versión que señala que los soldados se quedaron mirando “Popeye el marino” y no
vieron el golazo de Gacha, es atractiva la televisión.
En el edificio de al lado al
mío vivía un ingeniero solitario de origen soviético, y en el siguiente
edificio, una joven con el fenotipo de los Parker pero colombiana, pues todo el
aparataje estaba conectado al apartamento de mis padres, decían los soviéticos,
una habitación, una ciudad, y se pusieron en la tarea de distribuir
telecomunicaciones en todas las ciudades de América Latina haciendo
inteligencia y contra – inteligencia, solo hasta ocurridos los hechos me di
cuenta de que yo era como la mascota de Santodomingo que demarcaba las
producciones con historias de niñas como yo para descubrir en qué lugar se
encontraban escondidos los soviéticos. Suena extraño descubrir que de niña
soñaba con astronautas y que esa era la obsesión de Otty Patiño y Rosemberg
Pabón, de eso hablaban desde París.
Y en ese contexto de la
Guerra Fría y en las postrimerías de la Segunda Guerra Mundial surgen los
grupos armados ilegales en América Latina. La Segunda Guerra fue importante no
solo por Santofimio, sino a pesar de él, hubo un traficante de drogas español
en Bogotá franquista y Santofimio estaba destinado a darlo de baja. Ya habían
ocurrido los hechos del Valle, la caída del Gitano del LSD y la vinculación al
ELN del cura Camilo Torres Restrepo, enemigos acérrimos del español, y la
Escuela de Medicina de la Universidad Nacional ya tenía los cuadernos del Ché
Guevara para atender este tipo de situaciones, era la época de las armas
atómicas y para América Latina era una realidad desde la Crisis de los Misiles.
Pues el español había traído un equipo eléctrico de tortura bien sofisticado
basado en el calor de los hornos de las ladrilleras y en lo que luego se
llamaría Geodesia. Santofimio dio de baja al español franquista pero no pudo
desactivar los equipos. Esos mismos le daban influencia y no había quién se le
opusiera por miedo a la tortura. Él mismo continuó con los operativos a Toledo
Plata sumando las técnicas árabes de cortar manos y lenguas, haciendo la
corbata. Luego de esa situación, el Gobierno Colombiano decidió dividir la
señal de la televisión en dos, desde Gachancipá, y prácticamente construyeron
dos países. Gacha no comió cuento, las guerrillas tampoco y se comenzó a hablar
de la televisión como el cuarto poder, el medio para manejar a las masas a
través de estados emocionales. Mágicamente metían terror, “yo me acuerdo”, como
si la televisión pudiera seguir a un solo individuo y lo hacía.
De ahí la combinación de
todas las formas de lucha que incluían los medios de comunicación y la
proliferación de grupos armados de gente con dinero para sostener ejércitos
privados. En ese contexto, se moviliza el M-19, ellos en este proceso que
seguimos entendieron que Rojas Pinilla perdió las elecciones debido a la política
antinarcóticos que dividía a los medios en dos. Muchos votantes en el sur del
país ni siquiera sabían que el señor iba para la presidencia. Eso entre otros
fenómenos, como el hecho de que Santofimio era amigo de Nieto Roa y de Pastrana
Borrero y era quien finalmente decidía que se programaba o que no, él mejor que
nadie conocía los grupos armados y sabía que las FARC ya fraguaban serios
planes para asesinarlo. Pero hablamos de medios de comunicación.
La comunicación entre medios
y ciudadanía se ha vuelto difícil o sencilla dependiendo de quién esté
presidiendo. Cada gobierno determina sus políticas de medios también de acuerdo
con los intereses foráneos, un hecho que descubrimos fue que Virgilio Barco
Vargas fue muy prudente porque era en su sector en donde se encontraban las
armas atómicas. Él mismo asistió a los Juicios de Núremberg y a la creación de
la ONU.
Cómo conclusión de esta
historia, me interesa el papel de los medios y el poder, el poder detrás del
poder, los medios como representación de la ciudadanía, como mediación entre
los conflictos entre grupos de poder, la participación de los grupos
minoritarios en el juego de los medios, y las políticas de desarrollo
impulsadas desde los medios, políticas relacionadas por ejemplo con el problema
étnico. Ya en los 70’s, los EEUU producían televisión específicamente para
gente afrodescendiente y en los 90’s Discovery Kids hacía proyectos con
estudiantes de colegio hijos de veteranos de Vietnam con el objetivo de
establecer problemas en la sociedad relacionados con la guerra que perdieron.
Los medios en Colombia no
son consientes de la capacidad de persuasión que poseen, ni que son fatales si
se combinan con equipos bélicos del ejército, esto ocurrió en Tolemaida, con el
caso del marido de Marbelle y la filtración del narcotráfico a las bases
militares, de hecho es la base del Estatuto de Seguridad que fue tan terrible
por el nivel de palabras utilizadas. Todavía en los 90’s se hablaba de grupos
“terroristas” o “genocidas” en lugar de grupos armados al margen de la ley. Los
medios sin duda modulan los estados de ánimo de los televidentes y pueden
llevar incluso a una crisis económica si la teleaudiencia se desmotiva, y se
deprime.
Pienso que a los medios les
hace falta el componente del desarrollo que debe ser gestado por el gobierno
colombiano y como un proyecto de largo alcance, la información queda en chivas
sin profundidad y las noticias se presentan sin continuidad como una colcha de
retazos. Pareciera que a los jefes de redacción el tema del desarrollo aparece
sin pertinencia, no está agendada en el relato de país.
Para mí la maestría es
importante porque quisiera darle continuidad a un proyecto que comencé hablando
con Alfonso Cano, “Una escuela de gobierno para las FARC” en 2004, y es que en
la medida en que avanzo en mi investigación, la siguiente fase consiste en
entrevistarme personalmente con los actores de mi “delirio”, encuentro que
incluso el M-19 que tenía un proyecto muy concreto de trabajo que se consolidó
en la estructuración de la Constitución del 91, hoy por hoy no saben qué hacer.
La constitución ha prestado un gran beneficio, le puso coto a la corrupción,
corruptos que no pudieron pasar de la constitución del 86 y sus beneficios a la
del 91, desaparecieron. Sin embargo todavía las instituciones no se adaptan del
todo a la operación de la nueva carta de navegación. Ahí hay mucho trabajo, en
temas como el de la sobrecarga de tutelas, el aparato legislativo no estaba
preparado para manejar un flujo semejante, mientras que el M-19 continuaba en su
proceso de Verdad, Justicia y Reparación.
Todavía me parece pertinente
tener un blog sobre el tema y encontrar las respuestas de las diferentes
facciones de la sociedad. Los medios independientes como manera de consensuar
política pública, integrar el debate sobre discapacidad física y mental de los
desmovilizados y sus víctimas, el rol de los partidos políticos en la discusión
y el seguimiento a dos temas: la confluencia de los canales comunitarios con el
narcotráfico y que están siendo utilizados para secuestrar a las familias en su
propia casa (yo estuve 7 años pagando el servicio de cable sin recibir el
servicio como está oficialmente programado); y la continuidad de las políticas
de Plan Colombia son/sin grupos armados ilegales. Como dice la filosofía de
trabajo del Instituto Alberto Merani, me gustaría que los materiales que de la
Escuela se desprendan se “desarrolle en comunidad la lectura competente, el
análisis crítico, las habilidades sociales y las competencias afectivas” de los
participantes. De hecho ya estoy dictando charlas y haciendo talleres en Cajas
de Compensación y ya avancé en los datos de mi público objetivo.
Luego del horror que pasé,
es que un consultor experto doctorado me decía, usted me está hablando de temas
que sobrepasan su edad y su vivencia, yo me pregunto si todavía ¿será necesario
pasar todas las historias de todos entierros colectivos por televisión? Eso va
a ser una masacre mediática, ojalá definan una política razonable al respecto
mientras que asistimos a la comunicación del post-conflicto.
Sé que parece increíble todo
esto que cuento, pero hay que estar desmovilizado para entender que la
cotidianidad se vive de manera distinta, que el afecto y las emociones se ven
afectadas por la confrontación armada, que se trata de matar o morir, que
incluso cambia el concepto de familia, que otros son los sueños y que tener el
“hacer historia” como misión ya forma parte del adoctrinamiento.
¿Quién puede vivir con todo
eso?
2829
No hay comentarios:
Publicar un comentario